Todo lo puedo en Cristo
Nos complace anunciar que el artículo de Joel Peñuela Quintero de Colombia, “Todo lo puedo en Cristo”, ganó el segundo lugar en nuestro cuarto concurso de escritores. Los participantes en el concurso fueron invitados a escribir sobre este tema: ¿Con cuál personaje de la Biblia (¡aparte de Jesús!) te gustaría reunirte para cenar?, y ¿de qué hablarían? Puedes escribir en cualquier estilo, como diálogo o un libreto si lo deseas.
En cuanto al escrito de Joel Peñuela Quintero que ganó el segundo lugar, los jueces del concurso, editores y esposos Adriana Powell y Omar Cabral de Argentina, destacaron su buen desarrollo, contenido claro y creatividad. Unas 42 personas de alrededor de América Latina participaron en el concurso recién concluido.
Todo lo puedo en Cristo
Joel Peñuela Quintero
Fue fascinante llegar a la Roma del año 61 d.C. Un dispositivo me permitiría comunicarme con mis interlocutores en mi misión de entrevistar a Pablo preso allí aquel año.
—Hermano Pablo, tiene otra visita —dijo el soldado de la puerta.
Era una pequeña habitación, lúgubre e indecente. Había una vieja mesa de madera apoyada en la pared para no caerse y al lado una silla en similares condiciones. Detrás de una cortina vi salir a un hombre demasiado viejo para tener sesenta años. Su caluroso saludo se detuvo ante un ataque de tos que lo puso a punto del desmayo.
—He estado muy enfermo —explicó—. Hermano me disculpa un momento porque debo terminar la epístola.
PANTA ISQUIO EN CRISTO TO ME ENDINAMOUNTI —escribió Pablo—. Sentí un extraño vacío e inevitablemente di otra mirada circular al escenario, no alcanzaba a entender cómo es que el apóstol había sido capaz de escribir tales palabras en un escenario tan precario como aquel.
—¿Le pasa algo? —pregunto al verme boquiabierto.
—Siempre he creído que a los hijos de Dios no les falta nada material, que todo lo bueno les debe sobrar, incluso, creo que ni siquiera deben sufrir enfermedades pues deben vivir como hijos de rey y ser cabeza y nunca cola, porque: ¡Sufrir es signo de una vida sin fe!
—No entiendo nada —dijo Pablo—, pensé que lo había dejado claro.
—Mire hermano —continuó diciendo con firmeza—, me siento honrado de tener por cárcel esta casa. Ese soldado es ahora mi hermano, como muchos otros de la guardia pretoriana. Cierto es que aquí no hay muchas cosas materiales de las que pudiera presumir, pero así es como tomo la forma que el Señor quiere que tenga.
—He aprendido a vivir en la pobreza —siguió el apóstol—, igual que en la riqueza, así aprendí la importancia del contentamiento pues puedo vivir agradecido cualquiera que sea mi condición y finalmente aprendí que lo importante no es cómo yo viva, sino para quién, pero, sobre todo: para qué.
Salí corriendo porque mi tiempo se disipó como el agua entre las manos y debía estar puntual en la cabina del transbordador. Mi encuentro con Pablo me dio una perspectiva de la vida que cambió mi vida, por paupérrima que fuera mi situación podría decir como él dijo: panta isquio en cristo to me endinamounti: “TODO LO PUEDO EN CRISTO QUE ME FORTALECE”.
Joel Peñuela Quintero, es un hombre de 55 años, casado y padre de cuatro hijos: Yessid (27), Carolina (23), Emma (22) y Gracia (20), todos creyentes. Vive en Riohacha, La Guajira Colombia, administrador de empresas de profesión, ha sido pastor, consejero bíblico y líder cristiano por más de veinte años. Investigador bíblico con conocimientos en hebreo y griego. Amante de la escritura desde niño pero solo hasta hace dos años ha pensado seriamente en ser escritor. Acaba de terminar su primera novela histórica basada en el libro del Cantar de los Cantares.
Lea el artículo que ganó el primer premio, “No soy María”, por Nirvana Virgilio de México.
MAI y Letra Viva han organizado cinco concursos de escritores. El ganador de cada concurso recibe $50 USD y más adelante los jueces otorgarán un gran premio de $150 USD al mejor de estos cinco escritos premiados.
Les invitamos a todos a participar en el concurso de este mes: “Cuando veo cómo actúan los cristianos, en estos días, no quiero convertirme a su fe”, dicen algunos. Escriba una carta en respuesta a una persona que expresa ese punto de vista.
No olvide: Envíe tu escrito a [email protected] antes de la fecha límite del 30 de noviembre.
